lunes, mayo 31, 2010

A la hora de convertirnos en los niños que siempre debemos mantener latente.

Las prácticas de libertad son inherentes al ser humano, tienen que ver con la superación personal y el desarrollo de todo niño que llevamos dentro, el cual busca sin culpa ni pena crear castillos de arena, sin miedo a destruirlo por la abundante arena que observa,  construyendo así siempre una idea nueva de lo que él cree que es la vida.
No obstante, ante la gran evolución que ha tenido la sociedad y su capacidad de reflexionar estos aspectos de su vida, hemos tenido que tener también las prácticas de liberación.  Acciones por las cuales nos zafamos de los elementos constitutivos de un poder sobre nuestras conciencias y desarrollos. El destruir el dogmatismo esclavista es por el cual reconocemos a Nietzsche, y su legado del nihilismo apunta a llegar hasta lo más alto de la emancipación (prácticas de liberación) de la primera estructura de dominación y, así enfrentar lo que nos limita y no nos hace partícipes de las prácticas de libertad.
Lego de la liberación, debemos ponernos a trabajar por una capacidad de resistencia para sí lograr romper con el “status quo” o el “stablishment” que se nos ha legado y que nos impone una realidad que trasciende sin obstáculos. Aquí es donde podemos ver bien las metáforas del camello, el león y el niño. El dromedario nos impone el traspaso del todo hacia el otro momento que se avecina; el león rechaza ese trasvasije rechazando las cargas anteriores, pero no queriendo crear nuevas prácticas; solo el niño y su indefinición sexual lo hace capaz de trabajar por un cambio en el esquema dado y siempre ve los recursos para hacerlo.
Foucault nos viene a cerrar el cuadro ante la gran arremetida de lo que se nos ha legado de generación en generación, en donde nuestro fascismo interno ha logrado mantener esta situación sin grandes cambios y mantiene autorizados a los poderes al sometimiento de la humanidad a luchas de poder, prácticas disciplinantes-controladoras, prácticas y técnicas de saber. 
 
Atte.
HSQO

No hay comentarios.:

 
Creative Commons License
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.